Asociación Científico-Cultural Cisco de Picón


Actividades
Realizadas lupa

Segundo Concurso de Relatos Breves

ATRAGANTADAS
de Nora Casalanga


Era mediodía en la ciudad de Rosario el famoso restaurante “La buena Medida” que años atrás colgaba un cartel anunciando “aquí hacemos milanesas fritas con aceite Patito1” un clásico plato argentino, con el paso del tiempo se había convertido en un famoso gastrobar, allí habían quedado para cenar tres amigas, delante de un entrecot con papas fritas, Veronica, Alicia y Yessica se rencontraban.

Alicia estaba con los cubiertos en las manos, sentada frente a Jessica y a un lado de Verónica.

ALICIA: Esta comida es absurda, hace años que no nos vemos, desde bachiller siempre nos hemos detestado, ahora con treinta años cada una, que nos podemos decir.

YESSICA: Creo que tenemos mucho que hablar, ahora que somos adultas podemos reflexionar del porque tuvimos ciertos comportamientos.

VERÓNICA: Creo que a ustedes las vida las trató mejor que a mi, a la vista está, la verdad es que vine por el entrecot, en este sitio se come muy bien.

La tensión esta presente entre las comensales, se miran con cierto desprecio.

YESSICA: (Hablando con la boca llena) Las he reunido porqué voy a casarme, y la verdad que del bachillerato ya no me quedan conocidos, unos se fueron al exterior, con otros no tengo relación y con ustedes me une el odio de siempre. Una no puede casarse sin que haya representantes de cada etapa de su vida, ¿no les parece?

VERÓNICA: (Con la copa de vino en la mano) ¿Y quién es la víctima?

YESICA: Ustedes lo conocen, es Julio Paniagua, antiguo compañero nuestro... Caras de sorpresa. ALICIA Si, y antiguo novio mío.

VERÓNICA: Y mío también.

YESSICA: (Dejando caer los cubiertos sobre el plato) No tenía idea, que hijo de puta. ¡Nunca me dijo nada! pero no pasa nada, esto fue hace mucho tiempo, ¿no?

ALICIA: Hace tres años atrás estuvimos comprometidos, pero un día me dijo que quería tomarse un tiempo, y me partió el corazón, nunca más lo vi.

Llega el camarero, retira los platos y les deja la carta de postres, mientras vuelven a llenar las copas de vino.

VERÓNICA :Por esa época, me llamo y comenzamos a salir, me decía que había tenido una relación muy complicada, con una mujer que lo volvía loco con sus celos.

JESSICA: A mi me contó que sus dos últimas relaciones fueron un desastre, una de ellas era alcohólica y lo maltrataba, la otra le ponía los cuernos con todos los hombres que se cruzaban y le pulía la tarjeta bancaria.

ALICIA Y VERÓNICA: ¿Esas dos fuimos nosotras?

El camarero toma nota de los postres, Tiramisú para tres, la especialidad de la casa.

ALICIA: (Muy enojada) En mi vida estuve con un tipo que cogiese peor2, encima le huelen los pies y la madre lo sigue dominando... Lo odio.

VERÓNICA: La verdad es que coge fatal, pero a mi me llevaba de compras y se me olvidaba todo, siempre que podía tiraba de agenda, cuando él no estaba.

YESSICA: Son peores de lo que me imagine, ustedes son las que le arruinaron la vida, él es bueno, comprensivo, cariñoso. Y se va a casar conmigo.

ALICIA Y VERÓNICA: Pero coge fatal!

Llegan los postres. Las tres comienzan a comer, mientras van sintiendo un pequeño un cosquilleo en la garganta, comienzan a toser y a atragantarse, se pelean por la botella de agua. Se abre la puerta del restaurante y aparece Julio Paniagua quién se acerca a la mesa de las chicas.

JULIO PANIAGUA: ¿Como se sienten? ¿Atragantadas quizás? Es que es un postre muy, pero muy especial, pero no se preocupen, el efecto pasará en unas horas. Quiero que sepan que las tres me arruinaron la vida, que desde el día que me escondieron los calzoncillos en el vestuario del colegio y tuve que salir desnudo a la calle, y ni un taxi quería pararme, juré vengarme y lo hice y los estoy haciendo ahora, mientras veo como sus caras se hinchan como sapos. He sufrido durante años sus desprecios, pero la hora de la venganza ha llegado en forma de Tiramisú.

Ustedes no tiene idea lo que es odiar, las odio a las tres, pocas veces conocí mujeres tan insulsas como ustedes tres, que de tanto odiarse ni se preocuparon por ser felices, sexualmente las tres igual, sin importarle la persona que le acompañaba, me dan asco, y Jessica que sepas que jamás me voy a casar contigo, nunca, nunca....

A la media hora parte una ambulancia del restaurante, dentro van las tres mujeres intoxicadas cuidadas por un enfermero, en el medio otro enfermero y en una esquina de la ambulancia Julio Paniagua con tres tenedores clavados en la mano derecha.

Nora Casalanga
1Milanesa frita con aceite Patito: Filete de ternera empanado frito con un aceite de girasol cuyo nombre comercial es Patito y que en los años 70 era sinónimo de un buen aceite en Argentina.

2Coger: es la palabra que se usa en Argentina para definir follar.



-Bases y relatos recibidos-

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